Aina + Las Perras del Infierno + Ensaladilla Rusa. Sala Moby Dick. Hasta arriba.

En los alrededores a la Moby Dick se concentraba un buen número de personas
desde bastante antes del concierto. Miercoles y ambiente festivo. Entre los
presentes, muchas caras conocidas, de otros conciertos, de otros momentos.
Todos querían dar un último adios a una de las bandas de referencia en el
rock independiente de este país.
La espera se prolongó, como de costumbre, algo más que lo anunciado
previamente. Una vez dentro, Ensaladilla Rusa estaba atacando ya los temas
de su esperado debut, 'Coleópteros'. Este nuevo grupo, con miembros de
Mushitcians, A Room With a View y Silence in Music, demostró en directo la
falta de complejos y las ganas y necesidad de sus miembros de avance hacia la
experimentación sin idiomas, la destrucción de los estilos, y la busqueda,
a gritos que suben por el free jazz y mueren por el grind más aterrador,
de su propia personalidad. Una propuesta tan excitante como breve, pues no
pude disfrutar de más de dos temas de su directo. Mucha gente se preguntaba
'¿Qué coño es esto?', pues esto es justamente una inquietud, algo que busca
no dejar indiferente al que escucha. Muchos no los comprenderán, mientras
se comprendan ellos mismos, sobra. Una genial apertura ambiental para el
resto de la noche.

Acto seguido, el escenario se inundaba de sexo sudoroso con la actuación
del combinado donostiarra Las Perras del Infierno. Punk Rock del sucio con
un altísimo componente sexual. Las Perras, mostrandose muy pero que muy
perras, fueron destripando su rock a la The Cramps, The Dwarves
Pese a que la pose en muchas ocasiones parecía fingida, subieron muchos grados
la temperatura de la sala, increpando al público para que se unieran a su orgía de
punk y golferío.Ayudadas ocasionalmente por una cuarta perra, fueron desgranando su EP
Somos Las Perras además de versiones de clásicos como el I Wanna Be Your Dog
de los Stooges en una cachonda version castellana. Provocando hasta el final,
hicieron sudar a más de uno por todos los poros de su piel, haciendo mover
el cuerpo hasta al mismísimo Jesús Ordovás que por allí se encontraba,
dejando el terreno listo para los Barceloneses estrella.

Fin de la actuación de Las Perras del Infierno y momento para escurrirse
entre la gente e irse a la primera fila. Momento de conversaciones y de
saludos, comentarios varios y unas ganas increibles de que salieran Aina.
Cuando salieron al escenario, nadie quedó impasible. Largo aplauso,
presentación de la banda y corriendo a hacer ROCK. En mayúsculas si, por
que eso es lo que nos traía Aina, rock con todas sus letras, con todas sus
variaciones. Y es que han pasado muchos años desde que los de Barcelona se
pusierán detrás de sus instrumentos con el nombre de Aina. Despues de la
primera canción, Artur, mirando a los presentes con un aire entre
vencedor y vencido, quiso acercarse a sus amigos de A Room With a View, en
primera linea de combate. Iba a ser un tracklist directamente organizado
siguiendo las preferencias personales de Jose y Conrado, lo cual a mi me
pareció más que acertado. ¿Que mejor manera de despedirse de Madrid que
dedicando por completo el concierto a sus amigos?. El sonido que ha
alcanzado esta banda es brutal, casi perfecto. En su set repasaron todas
sus épocas. Poco a poco iban sonando Nice new attempt,
Helicopters, International Event, The right Day
... todas enormemente
ejecutadas, trasladandonos al universo Aina más y más según los acordes
machacaban nuestra cabeza. Además, sin olvidarse en ningún momento del
juego, de la improvisación. Cada canción sonaba a sí misma y a la vez a
algo nuevo, añadiendo partes instrumentales de gran contundencia sonora.
Con la sala al rojo vivo, Artur recordó lo dificil y grande que es Madrid,
y lo mucho que Alfonso, capo de Siroco, les había ayudado en esta ciudad.
Realmente el concierto sabía a despedida, un concierto plagado de momentos
emotivos, como ver a Jose con su copa en la mano y golpeando al aire cada
golpe de bateria, sonriendose y haciendose guiños, a Conrado siguiendo el
ritmo con un rostro de felicidad similar al del día del concierto despedida
de arwav, a Aina por completo entregados al sudor del Rock, y a toda la
gente de la sala trasladados a la Barcelona más rockera. Momentos como este
quedan grabados para siempre a fuego en nuestras mentes. Y sigue la fiesta,
Helicopters, Luton Can Wait, Ice ... hasta que Aina tratan de
despedirse de nosotros. Aplausos, gritos, patadas ¿Quien se va a quedar
quieto? Aina se nos van, todo el mundo a montar jaleo! Minutos despues,
salen para hacer un bis emocionante, con Uptight como primera joya de
despedida, y despues, tras unos momentos de debate acerca de que canción
cerraría la actuación (peticiones para repetir Uptight), suenan los acordes
de su tributo más reciente: You Shook Me All Night Long de los míticos AC/DC.

Y se nos van. Y se cierra la puerta del camerino. Y allí estabamos todos
con ganas de contarnos lo grandísimo que había sido este concierto. Un gran
momento, una gran actuación, y una gran banda. Y ahora, ¿qué?. Somos
huérfanos de Aina.