The New Year
The End Is Near

(Touch and Go Records, 2004)

 

The New Year, banda formada por los hermanos Kadane (Bedhead) y que cuenta entre sus filas con Chris Brokaw (Come, Codeine) a la batería, a los que se unen Mike Donofrio al bajo y Pete Schmidt a la guitarra, regresa tres años después de su enorme Newness End con su nuevo trabajo, The End Is Near, también para Touch&Go y también con Steve Albini en los créditos del LP en el papel de productor.

En este nuevo disco del combo norteamericano podemos encontrar una recopilación de canciones como aquellas a las que nos acostumbraron algunos de los grandes ausentes del indie rock de los noventa. Recogiendo el legado de una gran década, las canciones de The End Is Near repasan, mirando de fijo a los lentos desgarros emocionales a la manera Codeine o los propios Bedhead, composiciones provistas de un espíritu soleado y burlón como en Plan B, canción que podría colar como cara b de algún extraño single de Pavement, o paisajes envolventes cercanos a Doug Martsch y compañía como en The End Is Not Near, justo al comenzar el disco.

Pero pese a que a lo largo del disco puedan venirnos a la mente diversas bandas, The New Year consiguen en su sonido esa marca personal que caracteriza a las grandes bandas del resto. The New Year suenan a The New Year. Y pese a haber bajado también el listón emocional y cualitativo en sus canciones con respecto a Newness End, este The End Is Near se nos muestra más flexible que su predecesor, completando 39 magníficos minutos en 9 cortes para escuchar del tirón y sin dejar de lado ninguna pista. Y de entre esas 9, hay canciones que merecen una especial escucha al margen del disco, como Chinese Handcuffs, con Kadane susurrando entre los sutiles cambios de los 3 movimientos que forman el tema, pasando por distintas tonalidades atmosféricas, o Nº18, la canción más larga hasta la fecha de The New Year que llega hasta los 8 minutos, en un delicado ejercicio de progresión en la intensidad de todos los elementos que participan de ella, acabando en un distorsionado desarrollo instrumental de mediana duración.

Maestros creando pinceladas de tensión dentro de reposadas melodías, The New Year firman con The End Is Near una de las pequeñas joyas del rock a bajas revoluciones de este 2004.

Touch & Go

Pilot To Gunner
Get Saved

(ARRCO, 2003)

 

Los cuatro neoyorquinos que forman Pilot To Gunner se nos presentan atados, amordazados y magullados, cambiando la estética predominantemente roja y negra que marcaba Games At High Speed por una donde el fucsia, el blanco y el negro son los valores cromáticos protagonistas. Pero lo que no cambia una vez metido el cd en nuestros reproductores es su peculiar manera de combinar poderosos riffs de guitarra con afiladas estructuras rítmicas.

Tratando de aunar emo, rock, punk y sonido escuela Dischord, en este nuevo trabajo encontramos diferentes tablas en las que se sujeta la banda. Barrio Superstarrio, tema elegido como primer single de este trabajo, se convierte en la espina dorsal del álbum. Colocado en el ecuador del LP, el tema alza la cabeza notablemente sobre el resto de composiciones, convirtiéndose en un autentico himno de indie rock con claros tintes emo en un estilo tan cerca de The Promise Ring como de Hot Water Music, Alkaline Trio o Jawbox.

En torno a la médula de Get Saved se encuentran situadas estratégicamente el resto de canciones en la línea de este Barrio Superstarrio. Situada muy cerca, la pista cuarta, Hey Carrier, sigue por el camino de las enérgicas guitarras y estribillos pegadizos, a los que añadir tintes con toques de sonido Washington DC, sin llegar a saturar el resultado. Justo detrás de Barrio Superstarrio está No-Blooded, otro perfecto retrato de rock / emo sin demasiadas complicaciones estructurales. Y equidistantes a ese tema sobre el que descansa la obra, Get Saved abriendo el disco, donde una vez más acertados riffs dan forma a otra canción digna de ser lanzada como single, y en la dirección contraria, Sound Recovery cerrando el disco. Salvando la calmada Sorry Names, estas canciones mencionadas crean un bloque cuya calidad no es alcanzada por el resto de pistas de este Get Saved.

A todo esto hay que añadir la producción y la colaboración en voces, guitarras y teclados por parte de Jay Robbins (Jawbox, Burning Airlines) para completar un buen disco que busca renovar la sangre del rock emocional norteamericano. Dicen que la medida real de Pilot To Gunner la dan en sus directos. Estamos de suerte entonces, este mes les tenemos por aquí.

Arena Rock Recording Co.


Standstill
Standstill

(Bcore Disc, 2004)

 

Standstill, la banda catalana posiblemente con más proyección internacional de la actualidad, regresa a las tiendas de discos después de cosechar éxitos tanto discográficos como interpretativos, aquí y en media Europa, con su mordiente propuesta, presentándonos esta vez un álbum homónimo que supone una arriesgada apuesta a favor de una valiente evolución compositiva.

Lo primero que destaca en este nuevo trabajo de los de BCore es la elección del castellano para sus letras. Unas letras cargadas de metáforas inconformistas, plagadas de fotografías dolorosamente seminales y reflexivas, en búsqueda continua del motivo de determinados comportamientos sociales del ser humano. Frustración, decepción, desengaño, fragilidad emocional, falta de comunicación y situaciones de amarga venganza van dando forma a una temática cantada esta vez de una forma cristalina y accesible, usando el grito de manera puntual y con mucha intención.

Las estructuras sonoras en las que descansan los temas del nuevo concepto Standstill también giran hacia los medios tiempos de guitarras mordientes y de ritmos metálicos, dejando la voz de Enric en un segundo plano no demasiado lejano de manera ocasional. Ritmos repetitivos donde batería y bajo cobran un papel casi hipnótico, siendo las guitarras las que crean atmósfera unas veces o la destruyen a base de potentes riffs. Diez temas con marcado carácter conceptual que trasladan a Standstill desde las urdes del panorama hardcore hasta los dominios del rock apocalíptico. Una tras otra, repitiendo una y otra vez ciertas frases, las canciones de este Standstill quedan unidas en bloque, perfectamente solapadas, yendo desde composiciones más reposadas con fondo acústico como Feliz en tu Día o Si Me Levanto entre las que se cuelan canciones más contundentes como La Vieja Gibellina, Por Todas las Cosas o Poema Nº3. Rock de alto octanaje y con buenas dosis de experimentación en los interludios o en algunas bases rítmicas.

Un disco grande de Standstill, que contra todo y contra todos han hecho la música que sus estómagos guardaban. Es posible expulsar crudeza sin recrearse en extremos. Standstill lo ha demostrado. Directo a donde te estaba doliendo.

BCore